Seguidores

Adiós 2011, hola 2012.

Bueno. Ya se acerca la hora. Fin de año. La gente corre. Nervios. ¿Como será el próximo año?
Es lo que nos preguntamos todos. Todos pediremos un deseo. Nos propondremos algo que obviamente, dejaremos de cumplir. Pero lo que cuenta es la ilusión. Pero, ahora echemos una vista atrás. Desde principio de año, deseé que todo fuera mejor. Ser más fuerte, hacerme más mayor. También quise encontrar a alguien especial. Cosa que no conseguí, por cierto. Pero, supongo que todo llega. Quise poder dejar atrás a las personas falsas, esas que te amargan la vida. Disfrutar con las que de verdad te quieren. En este año, en este gran 2011, me han pasado cosas, muchísimas cosas. He ido viendo como tenía que olvidarme del chico al que quería. La desilusión me ha podido. Pero, he salido adelante. Me he ido de fiesta con mis amigas. He bailado hasta no poder más. He visto como una simple cena, podía significar una gran reflexión para mi. Me he dado cuenta de que cuanto más confies en alguien, más daño te hará. He tenido muchas conversaciones profundas. He descubierto quién de verdad lo vale, y quién no. Que no merece la pena calentarme la cabeza por alguien que me trata como a la mierda. He conocido a muchas personas, que sinceramente son increíbles. Lo he pasado mal, he tenido los malos momentos. Pero, han habido muchísimos buenos. He caído pero he sabido levantarme. He aprendido a asumir mi responsabilidad. He ayudado al que lo necesitaba y he hecho reír al que lloraba. He aprendido que el amor no es tan bonito. Que los chicos a mi edad solo van a lo que van. Y que cuando de verdad encuentre el amor, sabré que este chico lo vale de verdad. Y de tantos príncipes, todos han resultado ser sapos. Pero el dicho lo dice, después de tantas ranas, siempre habrá un príncipe. Quizá no vaya a ser el príncipe azul con la que todas soñamos. Pero estoy segura de que me querrá de verdad. He vivido experiencias horribles. Me he preocupado muchísimo. Y he descubierto que no todo es tan bonito como parece. He sido demasiado buena. A pesar de lo que deseé sigo siendo la de siempre. Y lo que no voy a dejar es que nadie me cambie. Por eso en este 2012, deseo poder disfrutar hasta el último segundo. No voy a perder más el tiempo, no voy a volver a ser la muñeca de nadie. Y quién no le guste, que no mire. Porque me encanta hacer reír a la gente. Y si por eso me llaman loca, me da igual. Exactamente igual. Este año voy a pasar de todo, y disfrutar con mi gente. Y esque aun nos queda por vivir muchas cosas, muchas más experiencias. Conocer más gente. Bailar. Irse de fiesta. Querernos a nosotros mismos. Y no dejar que nadie nos cambie. Aprovechar para emendar vuestros errores. Ser felices. Enamorarse, caer y volver a levantarse. Porque ese es el sentido de la vida. Porque este año es nuestro año, y  solo me queda por decir una cosa. Vivirlo.

Un vestido de flores y unos zapatazos.

- Ainara, cariño. ¿A donde vas esta noche?
- Me voy a dormir a casa de Marta mamá.
-Vale, prepárate la ropa.
-Eso hago.-
Si quereis que os sea sinceros. No, la verdad es que no íbamos precisamente a dormir. Ainara y Lena esa noche se iban de fiesta. Hace no mucho que pasó lo de thomas, y estaba harta de quedarme en mi casa. Aunque lo único que necesitaba era la compañía de mi mejor amiga. Pero ella se empeñó en que fuéramos. Pero, ¿y qué cojones? ¿Qué mejor forma de celebrar mi soltería que irme de fiesta? Lena decía, sólo iremos por educación. Pasamos, saludamos, bailamos un poco y nos vamos. Pero, a pesar de todo seguía siendo ella, la rebelde Lena. La amante del peligro, esa morenaza que tenía por amiga. Si había algo que se atreviera a comparar con la escalada, eso era irse de fiesta. Ella nunca se negaba. Castigada o lloviendo, o hasta con una pierna rota. Ella nunca descansaba. Y ahí estaba yo, la pobre y tímida Ahinara. La verdad, nunca me gustó llamar la atención. Cuando iba junto a Lena, era ella la que siempre hacía que la gente la mirase a su paso. Pero, aun así. La quería. Desde que thomas me dejó, ella ha estado a mi lado cada segundo. Lo que no he dicho es que me dejo por una rubia, vale, yo también era rubia, pero no era tan, tan guapa. No soy ni alta, ni baja. Más bien soy, soy un palillo. Era como el paraguas que siempre necesitas, cuando llueve. Mis pensamientos ahora se cortaron. No sabía que ponerme. Había pensado en un peto rojo que me había comprado hace poco. Junto con las egipcias, o unas bailarinas. Entonces algo cruzó mi mente. Y decidí que no, que estaba harta de lo normal, de lo plano, de lo largo. Entonces busqué en mi armario. Como me imaginaba, nada. Suspiré. Entonces cuál relámpago atravesé el pasillo de mi casa corriendo hasta la habitación de mi hermana. Oh sí, ella si que tendría lo que buscaba. Y ahí estaban. Los vestidos más cortos y ceñidos que puedas imaginarte. Desde el blanco hasta el negro. Desde el salmón, hasta el pistacho. Como decía mi hermana, toda una variedad. Decidí coger un vestido con un estampado de flores. Algo ajustado y corto. Como acostumbraba mi hermana. Nunca me hubiera atrevido a vestirme tal cosa. Pero, el amor hace locuras. O, como en mi caso, el desamor. Con el vestido en mano, fui hacia los zapatos. Precisamente esa noche pensaba ponerme unos tacones de aguja, los más altos que tuviera. Y, como pensé, de esos no faltaban. Cogí unos negros, que por cierto eran bastante altos. Me permití dudar sobre si podría andar sobre esos enormes, como llamarlos, ¿zapatazos? Pero bueno, me daba igual. Ya todo me daba igual. Pensaba en bailar hasta que me dolieran los piés. ¿Emborracharme? Quizá. Thomas estará allí. ¿No lo mencioné? Iba a disfrutar de lo lindo. Esa noche nadie me pararía los pies. Porque quién se atreviera a intentarlo, se llevaría un buen pisotón de mis, ¿zapatazos?.
Naces, creces y mueres. Desde un punto más objetivo, así es la vida de un ser humano. Pero mirandola de otro lado, no es así. Sabemos que la vida de una persona está llena de obstáculos, demasiados, de caídas, de metas, de superación, de sentimientos, de sufrimiento, aunque también de alegría, de sorpresas, de monotonía, de cambios, y muchas otras cosas. También existe aquello a lo que llaman amor, que puede ser capaz de mover montañas, que supera todas las murallas que le pongas y mucho más. Sabemos que cada persona es un universo, y en un solo país peden haber más 50 millones de universos. Todos con sus ideales, su originalidad, sus defectos, sus cualidades, sus manías y obsesiones, y, sobretodo, cada uno con su propia forma de ser. Pero, desde hace un tiempo las personas han estado abandonando su propio uníverso, casi podríamos decir que su propia alma, para vivir  en el de otros. O,como suelen decir, dejan de tener personalidad. Ya no son ellos mismos, ya no hacen lo que quieren, es como, dejar de vivir, es como si no tuvieras las riendas de tu destino, como si no pudieras escribirtelo tu sola, sino que otras personas lo decidieran por ti. Es como si los demás te dijeran qué tipo de vida llevar y como vivirla. Como si no fueras el dueño de tus decisiones. Por suerte, aun quedan persnas, que sí tienen esa chispa de originalidad, que las diferencia. Tampoco la vida es  justa para nadie, esta suele tratar mejor a las malas, que a las buenas personas. Parece que aquellas que merece la pena conocer, pasan desapercibidas. En esta sociedad tienes que seguir un lema, jode o te joderán. Por tanto, aquello que nos dice que la vida consiste en nacer crecer y morir, no sabe que falta una palabra, y esa palabra es...
Vivir.

Tiempo de soñar, de reír, de recordar, de amar, de volver al pasado, de vivir el presente, tiempo mágico, nostálgico, bonito, hermoso. También de disfrutar, de recordar todo por lo que hemos pasado durante este año. Ese en el que hasta el más mínimo detalle, o la más mínima palabra hace de eso, un universo. En el que necesitamos sentirnos queridos. Ese tiempo en el que necesitas estar rodeada de quién te quiere. De tu gente. Tiempo para enamorarse, también para sufrir. Para pedir que tus sueños se hagan relidad. Tiempo de sonreír, de besar, de reír. Tiempo de Navidad.


Los sentimientos. Aquellos que tanto nos confunden. Algunas veces son buenos o malos, raros o normales, alegres o tristes, grandes o pequeños. Pero yendo al grano, hay de todo.  Así como en este mundo hay personas cada cuál con sus cosas. Una forma de ser, un estilo, diferentes ideas. Pero en el fondo,  todos iguales. Hemos sufrido, llorado. Tal vez de tristeza, tal vez de felicidad. También tenemos nuestras pequeñas dudas, pequeñas inseguridades. El hecho de crecer nos asusta, de que todo esto acabe. Queremos vivir la vida, a nuestro ritmo y de la forma que queremos. Nos guiamos por los impulsos. Hemos probado la dureza del suelo y la brisa de la felicidad acariciando nuestro rostro. Hemos tenido un amor que ha marcado nuestro corazón. Quizá algunas miran la vida del lado positivo, y otras del lado negativo. Por eso nadie es superior a nadie, ni mejor ni peor, nadie. A la persona que se sienta pequeña, sola entre un mundo de gigantes. Piensa que hay muchas personas que ahora mismo se estarán preguntando lo mismo que tú. Por eso alegra esa cara, porque como tu sonrisa, ninguna.

Falsas, falsas around the world.

A ver cariño, si no te caigo bien, me lo dices. Que tranquila no te vuelvo a dirigir la palabra. Pero es que no es solo a mi, te has metido con las que quiero y con las que me apoyan, y no me da la gana de que te creas superior, mejor que yo, por ser o más guapa, o más delgada o lo que quieras. Si necesitas meterte con alguien te metes con tu perro. No voy a negar que no me ha jodido, pero ya lo dice el dicho " por un oído me entra y por otro me sale". Si ya lo sabía yo que no te caía bien, que para lo único que me quieres es para lo que te conviene. Y no eres solo tú, esque es medio mundo. Siempre todo se lo piden a la tonta, pero esta tonta se harta y está hasta el capullo de ello.

Y tú, ¿qué piensas del amor?'


¿No has estado nunca enamorada?¿No has sentido ese tan conocido sentimiento llamado así? A mi me gusta pero no me gusta. Cuando  empieza, todo es bonito, maravilloso, ese cosquilleo que sientes al verle, esa sonrisa que te derrite pffff, te gustaría que se deteniese el tiempo. Y sí, se hubiera podido detener. Luego llegan los momentos de dolor, llega la persona que no recuerda que tres son multitud. Los celos, las dudas. Todo se complica. Y te dan ganas de mandarlo todo a tomar por culo. Y es entonces cuando recuerdas cuando todo empezó, recuerdas esa risilla nerviosa que se te escapaba al verle. Los ojos, benditos ojazos. Como te hubiera gustado volver atrás, que se parara el reloj justo en el instante donde tu corazón se derretía.  Son tantos sentimientos confusos. Cuando estás enamorada, escuchas canciones, muchas. Y “casualmente”, todas te recuerdan a él. Sientes como que todas las canciones van dirigidas a vuestra historia. Sueñas todas las noches con un paseo por la playa de la mano.  Cuando te enamoras es como si no existiera un mañana, no existe ningún pensamiento ajeno a su persona. El amor es algo bipolar, duele, pero enamora, eres feliz, pero a la vez triste. Llega un momento en el que empiezas a desear no haberte enamorado de esa persona. Pero, en el fondo, no te arrepientes. Ni mucho menos, piensas que ha sido lo mejor que has podido hacer en la vida.

¿Te acuerdas?

De cuanto tú y yo éramos algo más. Cuando tus labios encontraban los míos. De cuando mi mayor adicción, era tu sonrisa. Esa chispa mañanera que me daba energía para todo el día. Cuando me conocías más hasta de lo que yo me conozco a mi. Cuando todos los días me regalabas una palabra cariñosa, que iba de la mano con esa mirada que hacía derretirme. Cuando todo era más fácil, cuando me sentía guapa, feliz. Cuando sabía, que lo nuestro lo podía todo. Cuando eras la razón de mi existencia, mi manera de vivir. ¿Te acuerdas? ¿No, verdad? Pués yo tampoco.
Amor y odio. Tan distintas, pero a la vez tan cercanas. Conectadas entre sí. El odio es la antítesis del amor, al igual que el amor es la antítesis del odio. Puede que quizá te odie, pero sé que en el fondo de mi corazón te quiero. El odio, ocupante de mi mente, el amor, dueño de mis impulsos. Te quiero, pero a la vez te odio. Te deseo, pero a la vez te repelo. Te necesito cerca, también lejos. Dedicarte la mejor de mis miradas, pero mi sonrisa más falsa. Intento no engañarme, no confundir sentimientos, aclarar ideas. Me
das verdadero asco, eres lo más o detestable que he conocido. Pero quizás seas la persona más bonita, que jamás haya amado en mi existencia. Amor y Odio Tantas razones para ser distintas como semejantes, y
en mi caso;
Esa razón eres tú.

Mis pequeñas gigantonas.


Aquellas personitas. Tan pequeñas para otros, tan grandes para mi. Tan capaces de alegrarme. De hacer de una simple cena, a la noche más divertida de mi vida. Y es que me faltarían vidas para agradecerles todo. Gracias a ellas, me he dado cuenta de que no merece la pena malgastar ni un segundo por alguien que no lo vale. Que hay personas mejores en esta vida. Que una puede volverse loca sin que la juzguen. Que puede ser ella misma. Quizá un poco celosa, egocéntrica. Pero a pesar de todo una persona que las quiere un montón. Y que lo daría todo y más. Quizá no sea una amistad de siempre, que no sea de aquellas de la infancia. Pero, en poco tiempo lo más pequeño se puede hacer gigante, y lo más malo puede ser bueno. Y desde que las conocí, mi vida ha cambiado. Sí, ha cambiado, pero para mejor, mucho mejor. La vida son dos días, y si hace falta dedico 3 días a los que me quieren, porque sé que ellos, lo darían todo por mi sin nada a cambio, y yo por ellas. En todo este tiempo he aprendido que falsas, hay muchas. Pero siempre hay buenas personas. Y una vez más gracias y gracias por ser lo más mejor de mi puta existencia.

Ella y sus remordimientos.

¿Nunca habeis tenido un día de esos en los que nada tiene sentido? ¿En los que siempre sales perdiendo? ¿En los que ya nada te duele? Ella sí. Empieza a pensar que nada en esta vida vale si él no está aquí. Nada es lo mismo sin su presencia. Sabe que suena raro, pero le echa de menos. Sí, la chica que dijo, "ya no eres nada" le echa de menos. Siente que se muere, y que está vacía e incompleta sin él. Admite que fue una cobarde dejandole marchar, una mentirosa, le engañó, se engañó. Se perdió en un mar de mentiras. Sabe que no hay vuelta atrás, que ya nada será igual. Y todo por su culpa. Pero, la vida sigue, no con él pero sigue. Sus recuerdos siempre estarán con ella. Y espera que nunca olvide que le quiere.

Firmado: Una tonta que le echa de menos.

100 Seguidores^^.

Esta entrada va para vosotros. Mis seguidores, mis lectores, que cada día  hacen más grande este blog y a mi. Ya son 100. Cuando empecé nunca creí que fueran a ser tantos. Muchas gracias por el apoyo que he recibido por vuestra parte, por los comentarios, por todo. Porque me hice este blog, buscando un sitio en el que desahogarme, y sí, efectivamente lo he encontrado. Me faltarían vidas para agradeceros el apoyo. Y es que eso es lo que me hace seguir adelante. Y espero seguir así durante mucho tiempo.

De ilusiones se vive, o eso dicen.

Siempre me ha encantado observar la lluvia caer por mi ventana. Cada gota que resbala, me trae recuerdos. Alegres, dolorosos, nostálgicos, de todo. Pero sobretodo, dolorosos. Estos días grises prefiero quedarme en casa. Y empezar a reflexionar. Emparanoiarme y emparanoiarme hasta que me explote el cerebro. Me recuerda a mis errores, a lo mucho que me he equivocado en esta vida. En que tú nunca me quisiste, y que mis ilusiones de nada sirvieron. Y es que la palabra lo dice, "ilusiones", tan solo eso. También hay recuerdos alegres, esos días en los que te quería, en los que sentía ese cosquilleo. Cuando me sonreías y esos ojos me iluminaban. También recuerdo aquellos ¡él te quiere! Me decían. Gran mentira, por cierto. Viví de una mentira, una trola, por así decirlo. Fui una victima más del amor, de tus ojos, de tus labios. Soñé con poder besarlos, simples sueños. Imaginé con poder decirte te quiero. Tengo una imaginación complicada. Pero, sobretodo tuve el presentimiento de que me querías. Menucho chasco.

Intento ser perfecta. Pero no puedo. Me di cuenta hace mucho tiempo, que no es posible. También de que los imposibles existen. Y de que el amor no siempre sale como queremos. Yo, no pido nada, no pido a ningún chico cañón. Solo a alguien que me quiera. Pero, ¿tan difícil es conseguirlo? En esta sociedad. Tienes que ser guapísima para tener pareja. Pero, yo no estoy por esa media. Sino por debajo. Y eso me deprime, y no poco. Me gustaría ser guapa, no lo niego. Y aunque lo neguemos, en estos tiempos o lo eres o nada. No tengo ni una hermosa sonrisa, ni unos ojos preciosos. Ni soy guapa. No tengo nada bueno, la verdad. Pero, tengo que quererme. Lo poco que tengo lo hago grande. Cada virtud son como 1000 defectos. Pero, lo que sigo sin entender es el por qué siento que la vida les va mejor a la gente guapa. Que la vida les sonríe. Sé que es un pensamiento pesimista, pero es lo que siento.





PD: Perdonadme, si ofendo a alguien. Pero es lo que ahora mismo siento. Gracias a todos mis seguidores, sois muy grandes.
Paranoias, paranoias y más paranoias. Y esque me pongo a pensar en el futuro. En qué voy a ser. Me pongo a pensar que sólo voy a ser una vez jóven. Y que no lo estoy aprovechando lo suficiente. Me da miedo hacerme mayor, tener más responsabilidades. Aunque todos queramos hacernos mayores, en el fondo tenemos miedo. Tenemos miedo, de dejar nuestra casa, de que todo cambie. De crecer.

Siento que la nostalgia se apodera de mi.

Solo el miedo de poder perderte. El terror a despertarme una mañana y saber que no estás. Que nunca más podré tenerte entre mis brazos. Besarte y besarte hasta perder la noción del tiempo. Saber que voy a echar de menos tu forma de ser, esa alegría tuya. Que nunca jamás podré decirte que te amo. No compartiremos más momentos juntos, ya no pasaremos las tardes abrazados viendo el atardecer, la noche ya no será testigo de nuestro amor. El echo de no poder sentir tu calor, y tu perfume, bendito perfume, me mata, cosa de la que antes se encargaba tu sonrisa. Sin ti, ya no tengo un camino que seguir. Todo se ha vuelto oscuro sin tu luz, esa luz que me dan tus ojos, esos preciosos ojos que tanto amo, y que tanto echaré de menos.

El amor, es aquél que comienza con una sonrisa, y termina con una lágrima.

Una mirada, una sonrisa, un cosquilleo, un suspiro. Dudas, nervios.
Una palabra, un abrazo, una noche en vela. Dudas, nervios.
Un comienzo, un te quiero, una caricia, un beso. Dudas, nervios.
Una discusión, una lágrima, un esto se acaba. Dudas, nervios.
Una reconciliación, una sonrisa, un beso. Dudas nervios.
Discusiones, y más discusiones, un me estoy cansando. Dudas nervios.
Un esto se acaba aquí, y, finalmente, una lágrima.
Encontramos el amor cuando menos lo esperamos. Buscamos durante toda nuestra vida vivir una historia de película. Pero al final, solo nos tocamos con "príncipes" que en realidad eran sapos. Y es que la apariencia es la palabra que reune más mentiras en menos palabras. Al fin y al cabo, nada sale como queremos. Pero, en realidad el mejor amor del que podemos hablar es el real. Aunque este lleve consigo sufrimiento, dolor y sus derivados. Pero aún así, ese cosquilleo que sientes cuando algo nuevo empieza, le da mil y un millón de patadas a los amores de película.

                                                                               --

¿Lo peor del amor? Amar y no ser correspondido.

Empezaré por sincerarme. Sé que tú, nunca sentirás por mí lo que yo siento por ti, mi amor. Pero solo si me dieras una oportunidad de hacerte feliz, de poder estar a tu lado y besarte y besarte hasta dejarte sin aliento. Eso sí, ten claro que nunca nunca te dejaré escapar. Podré ser imperfecta, podré defraudarte, pero nunca dejaré de amarte. No quiero que me prometas que va a ser para siempre, solo con tenerte, aunque sea por una noche, me sobra y basta. Y esque eres lo primero y a la vez lo último en lo que pienso al levantarme. Eres tan grande en mi vida, que ya es que no cabes. Ya te echo de menos solo con saber que te vas, pero sobretodo ya me siento triste, solo con saber que esos besos, caricias y te amo que te prometo, nunca existirán. ¿Por qué vivir de una mentira? Perfectamente sé que tú nunca serás mío.

La vida es una sucesión de golpes. De amores perdidos y encontrados. De personas que te ayudarán a levantarte. De heridas que nunca cicatrizan, de las que sí lo hacen, pero, si las tocas, duelen. De pasados dolorosos y futuros con mal aspecto. Está llena de sueños imposibles, de pequeñas personas que acaban siendo grandes. De las que de verdad creen, que no se rinden. Gente que crece con la idea de que todo es fácil y color rosa. Sin embargo, nadie nos enseña la realidad, la pura y dura realidad. Nadie nos enseña como sufrir, como aguantar el dolor, como caer. Nadie nos dijo nunca que todo fuera tan difícil, que no fueramos a vivir un amor al estilo Cenicienta, o Blancanieves. Que no vamos a ser perfectos. Que el camino está lleno de baches. Sin embargo, aun estamos creciendo, y no estamos preparados, pero tarde o temprano, a base de experiencia, podremos decir que la vida no es para tanto, solo tienes que pillarle el tranquillo.
No pido que sonrías cuando estés mal solo por no preocuparme, es todo lo contrario, cada vez que estés mal o quieras un hombro en el que apoyarte, allí estaré, siempre dispuesta a ti. Tampoco pido que me despiertes todas las mañanas con un  "buenos días princesa", tan solo que despiertes a mi lado. No pido que me dediques todos los días, simplemente que estés cuando de verdad te necesite. No te pido que me cubras de regalos, con un solo beso me conformo. Tampoco pido que no me falles, porque al fin y al cabo, nadie es perfecto y todo el mundo puede cometer un error. Tampoco te pido que dejes de ser tú mismo cuando estés conmigo, porque yo te acepto tal y como eres. Tampoco pido un para siempre, o un nunca acabará, solo pido un hoy y tal vez, un mañana.

¿Que me echas de menos?

-Espera un momento, vale, ahora.
 No ha nevado en el infierno,
 tampoco los cerdos vuelan.
 Entonces, lo siento chico
 pero no te creo.

Me defino como...

Diferente, sí, muy diferente. Me encanta sonreír, hacer locuras, muchas locuras. Impulsiva. Mi vida se basa en impulsos de los que en ocasiones me arrepiento, aquél término de "pienso, luego existo" para mí no sirve. Amiga de mis amigas, alguien en quién poder confíar de verdad. Por fuera una chica normal, pero por dentro una persona, ¿como decirlo? Complicada. Sí, esa es la palabra exacta. Soy algo bipolar, puedo estar triste a primera hora de la mañana y emanar felicidad por la tarde. En numerosas ocasiones extresante, a veces parece que realmente me gusta comerme la cabeza, aunque soportable. Directa, aunque a veces me cueste sacar mis sentimientos a la luz. Puedo estar muriéndome por dentro, y sonreír por fuera. Solo para no preocupar a los que me rodean, no me gusta ocasionar problemas a nadie, ser una carga, sino alguien en quién apoyarse. Divertida, original, me gusta mucho decir tonterías y sobretodo ver esas sonrisas que se forman en la cara de las personas. Bastante torpe y despistada. A veces me pasan cosas que sólo suceden en las películas. Eso sí, desgraciadamente, un amor de película, nunca he vivido. No muy fan del deporte, aunque me encanta el agua, es como mi pasión. Nadando me desahogo, es como escribir, te relaja, y te hace olvidarte de todo lo demás. Odio por encima de todo a las falsas y mentirosas, a aquellas que tanto te quieren por delante y tanto te odian por detrás. Me encanta la música, es una de mis grandes pasiones, sin ella no podría estar. En resumen, soy yo, yo misma. Y no pienso cambiar por nadie, porque aunque no sea perfecta, soy como soy.

Toda persona es bella a su manera.

Hoy, por una puta vez en la vida es hora de ser feliz. De dejarlo todo atrás, sin prejuicios y sin preocuparse de lo que pensarán . Porque ellos no valen ni la mitad que tú. La gente piensa que, para ser mejor persona, para ser alguien en la vida, hay que ser perfecto pero, ¿y qué más da si somos guapas o feas? ¿Si estamos gordas o delgadas?  ¿Si somos bajas o altas? Porque esos complejos no son más que etiquetas en esta sociedad. A todas aquellas personas que se sienten acomplejadas por su físico, que tengais en cuenta que no es lo más importante, y las que solo se fijan en el aspecto, tampoco lo son. No dejeis de sonreír, jamás. Porque la sonrisa es lo más bonito de una persona, y es de las últimas cosas que se debe perder. Yo, también soy una persona que se acompleja, bastante, bueno, muchísimo. Pero, ya es hora de dejar de hacerlo. Por una vez en toda nuestra existencia, vamos a hacer lo que nos venga en gana. Porque nada ni nadie, podrá pararnos los piés ni borrar la huella que dejamos a nuestro paso.


Bueno chicos, ya pronto se acaba la semana y empezamos el finde. Solo un día más. Quiero decir a todas aquellas personas que se acomplejan, que no es lo importante, lo verdaderamente importante es como te sientas tú y no lo que opinen los demás. No lo olvideis, sed vosotros mismos. (Os dejo esta canción, es muy bonita y a mi me ha motivado bastante).

Somos perfectos con defectos o sin ellos.

Estoy hasta el moño de la gente que solo se dedica a joder. Pero, ¿sabeis? Esas personas lo único que tienen es envidia, sí envidia. Cuando alguien te critica, es que tú has hecho lo correcto, lo has hecho bien, o mejor que aquella persona. Pero nosotros somos más maduros, y tenemos la madurez de aguantarlos. Aun así aun queda gente que si lo vale, pero con sus defectos y virtudes, como todo el mundo. Y por eso si juzgas por esos errores a la gente buena, esa persona acabará juzgando ella también, y dejando de ser tal y como era. Recuerdo las palabras de una amiga. "Una buena persona es como un rayo de sol, nunca dejemos que ese rayo se apague, nunca dejes que tu rayo se apague". No te dejes engañar por nadie, no somos perfectos, pero no tenemos que cambiar por nadie, ¿qué mas da como seamos? En cambio, la persona que te juzga quizá tenga el doble de defectos y uno de ellos es  juzgar por algo por lo que los demás no tienen culpa. Y creedme, a todas esas personas que nos juzgan ¿que pasaría si estuvieseis en nuestro lugar? ¿Lo pasaríais mal, verdad? Pués eso mismo, nadie es perfecto.
Eres como la "t" de la palabra te amo, esa letra sin la cuál no tendría ningun significado.

No existe un mañana, ni tampoco un ayer, existe un hoy y un no te rindas.

La verdadera esencia de la vida, consiste en vivirla sin tener en cuenta un pasado, ni un futuro. Sino un presente. Guiarte por el instinto, y no por los demás. Ser quién tu quieres ser en la vida. Tener sueños imposibles, aquellos sin los cuales estaríamos incompletos. Darle un sentido a vivir. Enfrentarse a los lunes con una buena sonrisa. Dar la espalda a aquellos que solo están ahí por la conveniencia, tú sabes bien quienes son. No dejarte guiar por lo que digan o dejen de decir de ti. La única que debe guiar tu vida eres tú. Mirarte al espejo y estar contenta de lo que ves, y aunque no seas perfecta, eres imperfectamente una persona. No te dejes engañar por las apariencias, nadie es perfecto, y menos aun aquél que dice serlo. Porque la verdadera perfección se encuentra en ser uno mismo. No te estanques en el pasado, en un amor que ya sabes que no tiene futuro, mira hacia delante. Todavía te quedan muchas personas por conocer. Y esque la vida es eso, disfrutarla al máximo, porque solo tenemos una y el tiempo pasa muy rápido.

Nuestro amor es más fuerte que todo lo demás.


La vida no viene con instrucciones.

Cuando crecemos nos damos cuenta de que no somos como creíamos que íbamos a ser. Creíamos que todo iba a continuar siendo igual de fácil. Pero no. Se acabó aquello de no tener de qué preocuparse. Ya no basta solo con pedir perdón. La vida se hace más dura, más pesada. Las responsabilidades van creciendo y en aumento. Empezamos a ver la realidad. Cumplir tus sueños no es tan fácil. Se necesita tiempo, y mucha paciencia. ya no es tan sencillo ser nosotros mismos. Empezamos a acomplejarnos, a fijarnos más en la opinión de la sociedad que en nosotros mismos. A la vez nos volvemos más duros, más resistentes a las heridas. Con el tiempo, vamos aprendiendo a frenar los errores. Pero, hay algo que nunca se podrá evitar ; el miedo. Es esa sensación que tenemos de que todo va a salir mal, y por eso no arriesgamos. Pero es todo lo contrario. La vida es un juego de azar. Nunca sabes lo que te va a deparar el destino. Por eso arriesga, sin miedo y sin preocupaciones. También crecer tiene su parte buena. Somos más libres, más independientes. Podemos hacer aquellas cosas que siempre quisimos. Como besar a un chico/a, tener nuestro primer coche,ir al instituto, poder ser mayores, aunque cueste es difícil, pero no imposible.


Y esque solo fuiste uno más de mi larga lista de errores, pero, he de recocer que has sido el mejor error en toda mi vida.



No te dejes engañar, tú vales más que todos esos gilipollas.




Esta noche, todo vale.

¿Lo sientes? Ese ritmo, pum, pum. Alcanza tus adentros invadiendo cada una de las partes de tu cuerpo hasta hacer que pierdas el control. Haciendo que te olvides de los problemas, de todo lo demás. Porque esta noche, es tu noche. Ponte los tacones más altos que encuentres conjuntando con el vestido más corto que haya. Ahora, es el momento de disfrutar. Canta a gritos las canciones que tanto te sabes. Baila hasta que te duelan los pies, no importa como lo hagas, solo baila. Porque, por hoy, ya nada importa, la noche y el amanecer serán testigos de como poco a poco, te vas olvidando de todo lo demás.




Ni me lo callé, ni me lo callo, ni me lo voy a callar ; te quiero.

Eres la razón por la que me despierto cada mañana. La razón de mi sonrisa. Eres como el primer rayo de sol después de una tormenta. Una mañana soleada. Algo indispensable, Eres especial. Allá a donde vayas vas contagiando tu felicidad. Sabes como hacerme reír sin ni siquiera decir una palabra. Tú has roto el tópico aquél que dice que la perfección no existe. A cada instante me pregunto, ¿como te puedo querer tanto? ¿Como puedes ser tan grande en mi vida? ¿Como me puedes hacer tanta falta? Hay personas que opinan que el amor es simple atracción. Pero, no las creo. Porque el amor existe, mi amor existe.







Yo.

¿Qué decir sobre mí?
Para empezar, que tengo mil y un millón de defectos. He cometido grandes errores en mi vida, pero sin duda, he aprendido. Para decir la verdad, no soy alguien que se enamore fácilmente, soy bastante realista. Sé lo que es el amor, y lo que ello conlleva. Soy bastante despistada, me tropiezo constantemente, digo cosas sin sentido. Estoy algo loca, claro. Me encanta hacer reír a las personas que tengo en mi entonrno, es como un vicio. Ver que alguien estaba mal, y haberla hecho reír me da alegría para toda una semana y más. Antes que contar mis problemas, prefiero escuchar lo de los demás. no me gusta ver a la gente preocuparse por mí. Soy algo paranoica y me extreso muy a menudo. Una de las frases que más me define es "hago una montaña en un grano de arena". Soy algo perfeccionista, bueno demasiado. Me suelo callar las cosas, suelo aguantármelas hasta explotar. Eso es uno más de los millones de defectos que tengo. No me gusta hacer daño a nadie, y si lo hago, que sea sin querer. No puedo enfadarme con nadie, no soy capaz, siempre busco una excusa para no enfadarme, aunque no la haya, pero la busco. Soy algo complicada de entender.  Bipolar, es la palabra que me define. No me gusta seguir las modas, prefiero ser yo misma. Soy muy tímida, bastante, muchísimo. Quizá a algunas personas no les guste mi forma de ser o piensen que soy una inmadura, pero ¿y qué? No voy a cambiar por nadie. Nunca.


Encantadoramente malo.

Eres malo, travieso, te gusta jugar con las personas. Pero a la vez tienes ese puntito dulce que te hace encantador. Y eso es me encanta. Me haces perder el control, desearte más y más hasta no poder. Tienes ese algo que no se puede describir con palabras, pero que puede conmigo. Yo siempre fui de aquellas que no confía en el amor, que sabe como es la pura y dura realidad. Pero, sin embargo. Me has hechizado con tu sonrisa. Me has iluminado con tu mirada y me has embriagado con tu perfume.

Si la vida te da limones, haz limonada.

Hoy, es un día de esos en los que te levantas con el pie izquierdo, todo te sale mal, y empiezas a pensar ¿para qué seguir adelante? Le dejas de dar un sentido a tu vida. Pero, en realidad este es el momento idóneo para darle dicho sentido, si no ¿cuando lo harás? Ahora es cuando te tienes que levantar, alegrar esa cara, sonreír y demostrar a la vida que si ella te da 1000 patadas, tu se la devuelves.




Por delante me quieres y por detrás me odias.

Tanto que era tu mejor amiga, tanto que me querías, y resulta que al final me criticabas por la espalda. Tantos te quiero por delante y tantos eres una puta por detrás. Pasemos momentos que para mí lo fueron todo, pero luego resulta que lo único que querías de mi era utilizarme, como lo has estado haciendo estos últimos años. Para mí tú eras la única en la que de verdad confiaba, la que yo pensaba que no era del montón. Pero, la vida da muchas vueltas, y yo estoy ya harta de dar vueltas. Pero, ¿sabes que te digo? 
QUE TE JODAN. 


Supongo que supongo demasiado.

Supongo que nada dura para siempre. Supongo que no te amé demasiado. Supongo que no era suficiente para ti. Supongo que no estabas cómodo conmigo. Supongo que no estuve suficiente tiempo contigo. Supongo que era como las demás, del montón. Supongo que no te conocía lo suficiente. Supongo que no sabía comprenderte. Supongo que no soy lo que quieres. Supongo que no te presté la atención que necesitabas. Supongo que no te dije todos los te amo que tu esperabas. Supongo que no fui la que te hacía sonreír. Supongo que no te parecía lo suficientemente guapa. Supongo que no me comporté contigo lo mejor que pude. Supongo que no supe valorar lo que tenía. Supongo que supongo demasiadas cosas. Pero, sino, ¿por qué me dejaste sola?






Odiamos a quién nos quiere, amamos a quién nos odia.



Los sentimientos son incontrolabres e impredecibles, especialmente aquél que todos dicen haber sentido, pero pocos lo han hecho de verdad. El amor. Me enamoré de ti con tan solo mirarte, antes de conocerte ya sabía que tú serías alguien importante en mi vida. Yo no soy de aquellas personas que cree que el amor verdadero nace con el paso del tiempo, sino que el amor verdadero es aquél que tiene más intensidad, el que lo arrasa todo a su paso.






Pasado medio pisado.


Pasa el tiempo. Te sigo queriendo. Tu recuerdo sigue ahí, clavado en mi corazón como una palabra tallada en una piedra. Tu me enseñaste a amar, a sentir, a imaginar, a volar, a soñar. Me enseñaste el significado de la palabra amor, aprendí que no debía mirar al futuro sino al presente, al día a día. Me prometiste un para siempre.Pero, todas aquellas palabras quedaron destruidas, quemadas por el dolor, tachadas del mapa. Ya no queda nada de lo que tu me enseñaste, absolutamente nada.







Goodbye summer.


Nueva clase, nuevas personas. Nos encontramos con los amigos de siempre, y también con aquella persona tan especial. También es una oportunidad de dejar atrás al pasado, de volverse a enamorar. Aquellas personas con las que nunca has hablado serán muy importantes en tu vida, algunas te defraudarás y otras estarán siempre ahí.



Mi felicidad, es la tuya, mi tristeza, ¿Qué tristeza? Dejó de existir a tu lado.


Se nos quedó corto aquello de querernos. Y es que cada día te quiero más y más y no sé como poder demostrártelo. No eres un príncipe azul, pero eres mi príncipe verde. El ocupante de mi corazón, de mis sueños. Eres mi razón de vivir, pero, aun así, moriría por ti. Tú me has hecho soñar despierta, sentirme como una princesa de aquellos cuentos que nos contaban antes de dormir. Gracias a ti me siento especial, más guapa que nunca. Me siento yo. No quiero pensar en un mañana tampoco en  un ayer, quiero pensar en un hoy y en ti. Sé que no soy la primera, ni la última. Sé que nada es para siempre. Pero quiero que nunca nos arrepintamos de esto, que miremos atrás, sonriamos, y recordemos lo felices que éramos.



Eres tan dulce como el chocolate, y a la vez tan amargo como el limón



Decías que si me marchaba, morirías y ahí estás, como si nada.


Besos y te quieros que quedaron escondidos en el fondo de un cajón junto a una foto de nosotros dos juntos, felices. Recuerdos que vienen a mi mente como balas. Recuerdos que me queman y me matan por dentro. Aun me acuerdo de cuando me decías que me amabas, que me necesitabas, cuando me echabas de menos aún cuando no me había ido, que te hacía sentir especial. ¿Donde han ido a parar todas esas palabras? Al parecer se fueron contigo cuando te marchaste y me dejaste sola, hundida, destrozada. Decías que no querías perderme, que era lo mejor para ti, que si algún día me marchaba, mi ausencia te mataría. Pero, aun así, hoy te veo feliz, tranquilo, como si nada hubiera pasado, como si el pasado hubiera sido borrado.Como si nuestra historia hubiera sido un cuento chino. Como si aquél lugar en el que nos veíamos tantas tardes, nuestro lugar, hubiera sido tachado del mapa. Como si yo, no hubiera existido.




Cada persona es un mundo, y cada mundo es diferente. Con sus opiniones, sus gustos, ect. Pero, sin embargo ahora nos empeñamos, en ser normales, uno más del montón. Para ello queremos ser lo que no somos, aparentar lo que nunca seremos. Nos dejamos llevar por modas que en ocasiones no tienen ni piés ni cabeza. Y todo, ¿por qué? Por ser aceptados esta puta sociedad. ¿Sabes lo que le digo yo a la sociedad? 

QUE OS JODAN.


Capítulo 3.

Bueno este es el final de la introducción, a partir de ahora será la verdaderas historia, me gustaría que me dieseis vuestra opinión de si debería seguir con la historia o no. Gracias y un beso enorme :D
CAPITULO 3 EL GRAN DÍA;

Era viernes, el día anterior del partido. Casi el gran día, casi la final. Todo el mundo daba ánimos a Dani, otras le ofrecían quedar después del partido. Él me llamaba su Gato de la suerte, , como no, lo había sacado de Garfield. Ahora lo tenía claro, él me gustaba y se lo iba a decir después del partido. No sé como reaccionaría pero, tenía que intentarlo.

POR LA TARDE.

-         Muy bien. ¡Pedazo de gol! Jajajajaja- Dije

-         Sí, claro. Lo que pasa es que exageras.- Dijo Dani sacándome la lengua.

-         Es verdad jajajajajaja. A quién voy a engañar te estoy haciendo la pelota.

Dani me sacó el dedo.

-         Bueno, creo que ya estás preparado pequeño saltamontes.

-         Como usted diga mi sensei.

-         Dani se acercó a mí, como el anterior viernes. Estábamos muy cerca. Demasiado diría yo. Podía sentir su aliento.

-         ¡Ah!

Malditos aspersores, nos estábamos empapando.

-         Da igual, así estamos fresquitos.

-         Sí, fresquitos, tú lo que estás es loco.

-         Calla Garfield.

Soltemos una carcajada, Dani me cogió de la mano.

-         ¿Me concedes éste baile?

Bastante roja le dije que sí. Entonces cogió su móvil y de él sonó la canción

"My inmortal, de envanescense."
Aquella fue una tarde mágica.
Amaneció lleno de niebla. Llegó el día. El partido era a las 9:30. MIERDA. Otra vez llegaba tarde eran las 9:10 y el estadio estaba a 15 minutos. Tenía que darme prisa.
-         Mamá no llegamos.

-         Tranquila cariño, tú vístete que llegamos.

Me vestí.

-         Mamá es muy tarde son y 20 no vamos a llegar.

-         Cariño, si vamos por un atajo seguro que llegamos, ya verás.

Entonces se me ocurrió una idea.

-Iré en bicicleta y nos veremos allí.

- De eso nada, no voy a dejar que te vayas por ahí tu sola, ¿Has visto la niebla que hay? No se puede ver nada. Podrías matarte.

-¡Pero mamá!

-De mamá nada, te vas en coche. Sube a ponerte los zapatos.

Entonces no sé como, ni por qué, me puse los zapatos y salí por la ventana. Cogí la bici y fui para allá.

DANI.

¿Dónde estará? No sé si podré ganar si no está,  ella me ha ayudado muchísimo y no se lo he agradecido.

-Hey Dani, llega la hora- Dijo Javier, un compañero.

Salí al campo, estaba lleno de gente, ahí estaban mis amigos, mi familia. Pero me faltaba alguien, ella, no sé si podré hacerlo.

Recuerdo sus palabras.


-“Eso no es cierto! Escúchame tú puedes hacerlo, tienes que confiar en ti mismo, no olvides que los sueños son solo sueños cuando uno deja de confiar en que se hagan realidad, tienes que luchar por ello y no rendirte, eso sí, te prometo que no estarás nunca solo. ”


Bueno, llega la hora.

Los contrincantes son buenos y rápidos. Nos ganas por 1. Ya es el descanso de la primera parte, dentro de 5 minutos será la segunda. Tengo que confiar en mí. Ahora demostraré todo lo que me he esforzado, esto va por ti Marta. Salí al campo le tocaba sacar al otro equipo, es la hora.

El partido fue duro, hasta me hicieron tres faltas pero metimos dos goles, uno de ellos mío, el del final del partido. Ganamos. No me lo creía estaba todo el mundo felicitándome, pero me faltaba algo. No podía concentrarme.

Por la noche hicimos una gran cena, mi madre mi padre y mi hermano pequeño. BIB BIB. Sonó el teléfono. Me levanté pero mi madre dijo.

-         Lo cojo yo cariño.

-         ¿De verdad?

-         El campeón tiene que descansar- Dijo con una amplia sonrisa

-         Oye Dani, tenemos que cenar con Marta y su madre para agradecerle que te ayudara.- dijo mi padre. Te imaginas que de mayor tú y Marta…

-         ¡Papá!

-         Si se nota que te gusta

No sé por qué, pero me puse rojo como un tomate.

-         A mí no me importaría que fuera mi hierna.

Me puse más rojo

-         A Dani le gusta Marta.

-         ¡Mario! ¿Tú también?

Nunca había pensado así de ella la verdad, y no era malo, me sentía a gusto.

De repente apareció mi madre con el teléfono, llorando como una magdalena, le temblaban los brazos.

-         ¡Mamá! ¿Qué ha pasado?

-         Ha llamado la madre de Marta, ella intent... tó ir al pa...par

-         -Tranquila cariño, relájate

Un mal presentimiento me recorrió el cuerpo.

-Intentó llegar antes al partido, su madre, ella quiso ir en bicicleta en ver de en coche, pe... ro no le dejó entonces, ella escapó con la bicicleta, el semáforo estaba en verde para los peatones, pero un coche que tenía mucha prisa se saltó el semáforo en rojo, ella no podía ver nada con la niebla, lo último que se oyó fue el frenado del camión  y un grito.  La…atropelló. 
Marta está en coma.


MN.


Eres esa clase de persona que consigue hacerte reír antes de que puedas decir ni una palabra. Una persona que puede adivinar lo que le está pasando a alguien con tan solo una mirada, y sabe como aliviar su dolor. Pero siempre habrá un dolor que nunca podrás curar, el de tu propio corazón.

Te quiero .

Al final pude decir que te he querido desde el primer día, pero lo que tu no sabes es cuanto tiempo estuve esperando este momento, cuanto tiempo me costó tomar la decisión de confesarte esto que me está matando por dentro. Si no te lo quieres tomar enserio, bien por ti. Pero ten en cuenta que te estoy abriendo mi corazón, contigo estoy sintiendo cosas que no había sentido nunca. Por lo menos ten la decencia de fingir que lo que te estoy diciendo te importa algo. 
Aunque tú y yo sepamos que es mentira.

Capítulo 2 (: .

CAPITULO 2

Las siguientes horas pasaron muy lentas,  Sociales y Valenciano.  Por fin sonó la sirena.  Y fui con Susana, mi mejor y única amiga. No me llevo bien con el resto, sin contar que se meten conmigo. Me llaman la solitaria porque solo voy con Susana, pero los ignoro, prefiero tener una amiga de verdad a cientos de falsos amigos que por delante me traten como a una reina y por detrás me critiquen.

-         La clase de hoy ha sido aburrida ¿eh?

-         Sí, sobretodo la de Sociales, me encanta la historia pero no como él la expresa. ¿Qué tal te ha salido el examen?

-         Fatal jajajajaja y a ti Marta.

-         Me ha salido bien, solo que los problemas eran algo difíciles.

-         ¿Sólo eso? Eran ¡Imposibles de hacer!

-         Exageras mucho jajaja

-         No, lo que pasa es que tu eres muy lista. – Me dijo con una sonrisa, señalándome la cabeza dijo.

-         Yo no sé como pueden haber tantas cosas ahí. Es como un baúl sin fondo.

-         Jajajajajaja, que va.

Estuvimos hablando un buen rato. Sonó el timbre. Y entré a clase, las siguientes horas, C Naturales, Gimnasia y ciudadanía a última. Por fin tocó la sirena, ya era hora de irse. Cuando todo le mundo se fue, Dani me esperó. Siempre volvíamos juntos, los demás se iban en autobús. Él era el único de su pandilla que no se metía conmigo, me defendía. Sus amigos le preguntaban que como podía ser amigo mío. Pero aun así de ser la chica a la que todo el mundo debía evitar el me hablaba, desde pequeños.

Aunque eso sí, al ser como es, el siempre estuvo en el grupo de los populares. 

En el camino siempre hacíamos lo mismo, comíamos golosinas, él compraba ositos y yo llaves picantes, nos encantaban, así era todos los días. Llegué a mi casa bastante feliz por saber que tenía un amigo así. Nos despedimos con la mano y entré a mi casa. Ésta tarde lo vería otra vez, él siempre venía a que le ayudara con el instituto, a pesar de ser el cañonazo de clase y el capitán del equipo de fútbol, era corto en los estudios, pero los sacaba, con esfuerzo, pero lo hacía. Fui a comer, ese día habían macarrones, me los comí con alegría, le conté mi aburrido día en las clases a mi madre y fui a mi cuarto a seguir leyendo el libro por el que me había quedado. Me puse a hacer los deberes hasta las 4 de la tarde, cuando llegó Dani, tenía que ayudarle con Naturales, la energía, era un tema difícil, me costó que lo entendiese, pero lo hizo. Lo encontré un poco serio.

-         Dani, ¿Te pasa algo?

-         No, no es nada.

-         ¿Seguro?

-         No, de verdad.

-         No me lo creo.- Y le lancé una de esas miradas de pena, que por cierto había heredado de mi madre.

-         Está bien. He discutido con mi padre. La discusión ha empezado porque está todo el día metiéndome presión por el partido del sábado. Todo el mundo espera que ganemos, espera lo mejor de mí,  ayer, en el entrenamiento, lo hice de pena, no me salía nada bien, desconfiaba de mí. Eso es que no valgo para el fútbol. Es que no valgo para nada, para los estudios soy un asco, con la familia también.

-         ¿Pero como se te ocurre esa idiotez? Eres el mejor en fútbol, es capitán del equipo, y vales para profesional, los estudios se te dan bien, lo estás sacando.

-         ¡Con tu ayuda!

-         Pero lo estás haciendo, todos tenemos problemas con la familia. Lo que pasa es que estás perdiendo la confianza en ti mismo. Estás haciendo del fútbol como un trabajo, una orden. Y no como antes, para ti el fútbol tiene que ser divertido, algo que hagas por diversión, porque te gusta.

-         Ya, pero mi padre me está metiendo presión, si no gano, perderá toda la confianza en mí, dejará de estar orgulloso de mí, dejará de quererme. Y no podré hacer realidad mi sueño de ser futbolista.

-         ¡Eso no es cierto! Escúchame tú puedes hacerlo, tienes que confiar en ti mismo, no olvides que los sueños son solo sueños cuando uno deja de confiar en que se hagan realidad, tienes que luchar por ello y no rendirte, eso sí, te prometo que no estarás nunca solo. Vamos a hacer que recuperes la confianza.

-         Tienes razón ¿Como?

-         No lo sé, pero de alguna formal podrás.

Fuimos a la pista de fútbol. Allí el me demostró lo que podía hacer, lo veía serio, desmotivado, sin ganas de jugar. No era el Dani que conocía, el que disfrutaba tanto jugando al fútbol.

-         Muy bien, entonces tendremos que empezar desde el principio. No soy entrenadora de fútbol, pero por lo que sé de mi padre, algo sacaré.

Mi padre es entrenador de fútbol.

-         Primero empezaremos por pasarme la pelota.

-         ¿Estás de broma? ¡ Pero si eso lo hace hasta un perro¡

-         Ya, pero tenemos que ver tu puntería

Estuvimos practicando, se le fue varias veces la pelota, una vez fue a darle y sin querer tropezó y se cayó al suelo, no tocó la pelota. Me reí bastante, aunque estaba mosqueado también empezó a reírse. Éste si que era el Dani que conocía. Seguimos con otros juegos, como recatear, a chutar contra la pared, a meter goles. Lo veía feliz, otra vez. Cuando llegó la hora de irse, nos despedimos y él me dio las gracias por vigésima vez, dijo que quería repetir, y que fuéramos al día siguiente. Era miércoles y faltaba poco para el partido. Los días transcurrieron bastante tranquilos, no se metían mucho conmigo, prácticamente pasaban de mí. El viernes ya era la última hora.

Susana me dijo.

-         Tía, entonces ¿Has quedado con Dani otra vez?

-         ¡Sí! Me encanta pasar tiempo con él.

-         ¿Y no será que te gusta?

-         ¡No!

Cuando oí aquello me sonrojé bastante,  nunca había pensado en Dani de esa forma. Siempre había sido mi mejor amigo, y estar con él sería romper nuestra amistad y si todo acabara mal. Un momento. ¿Se puede saber en qué estoy pensando? Dani es mi mejor amigo, y no vamos a estar juntos. ¡Ay mi madre que creo que me gusta! Aquella tarde la pasé rara, estuvimos practicando el regateo, Dani lo hacía genial como siempre. Entonces me dí cuenta lo guapo que era. Ese rostro tan perfecto, esos ojos, parecía un muñeco. No podía parar de pensar en él, no lo veía igual. Me gustaba, sí y bastante, ¿Por que Susana tendía que haber dicho eso? Se quitó la camiseta y pude ver su torso desnudo, con cada pectoral bien marcado, era perfecto.

Estuve toda la tarde roja.

-         Garfield, ¿Te pasa algo? Llevas toda la tarde en otro mundo, y estás más roja que un tomate.

-         ¡No! No me pasa nada, jaja, no es nada tranquilo.

-         Ay ay que creo que a Garfield le está empezando a gustar alguien. Dime, ¿Quién es?

-         ¡Nadie! ¿Quién me va a gustar?

Me empecé a reír como una loca, me daba miedo a mí misma.

-         Uy, esa risita jajajajaja

-         Ay, no me gusta nadie. Y tú. ¿Hay alguna chica?

Lo dije con una sonrisa, pero en el fondo estaba esperando para saber la presa a la que atacar.

- Nadie jajajaja , de momento, además aun soy joven , cuando termine este curso, me echaré novia. ¡Oye no me cambies de tema!

Me reí, pero en el fondo lo que dijo me entristeció,

-         Pues entonces le diré hasta cuanta edad estuviste comiendo leche del biberón.

-         ¡No serás capaz!

-         Ponme a prueba ¡Já!

-         Entonces yo le diré a tu novio, que te gustaban las barbies hasta el año pasado.

Entonces soltó una carcajada.

-         ¿Sí? Eso ya lo veremos.

Me subí a su espalda y empecé a darle collejas. Al intentar quitarme tropezó y se calló.  Y yo con él. Caí encima de él. Empecemos a reírnos. Entonces de repente hubo un extraño silencio, nuestros labios estaban muy juntos, podía ver el color de sus ojos perfectamente y sus labios, la tentación me podía, cada vez estaba más cerca y.

BIB BIB BIB BIB. El móvil. Era la madre de Dani, decía que era la hora de cenar. Entonces me dí cuenta, estaba encima de él. Me aparté, muy roja. Todo fue muy extraño.


En el partido, Dani hizo unas jugadas espectaculares, e incluso me dedicó un gol. Ganaron, 3-0. Fue uno de los mejores partidos que he visto nunca, se le veía tan lleno de energía.

A la semana siguiente era la final, todavía más presión pero él era fuerte y estoy segura de que lo conseguiría además, me regaló dos entradas para mí y mi madre. Alicia, esa semana decidió tomarla conmigo, pero un día se pasó de la raya.

-         No me extraña que tus padres se divorciaran, con una hija como tú.

Estaba harta de aguantar, entonces me lancé sobre ella y le pegué un guantazo, ella me lo devolvió, nos empecemos a pelear y Dani nos separó. Estaba hecho una furia.

-         ¡Pero ¿Qué coño hacéis?!

-         ¿Has visto lo que me ha hecho Dani?- Dijo Alicia.

-          también he oído lo que le has estado diciendo durante esta semana, te lo mereces.

En ese momento me dí cuenta, de que estaba defendiéndome a mí en ver de a Alicia, que era de su grupo. Podía hasta pelearse con sus amigos por mí. No podía permitirlo.

-¡Puedo cuidarme sola Dani!- Dije.

- Pero solo quería ayudarte.

-Ya, pero no necesito tu ayuda.

En la cara de Dani vi decepción, no podía a ver dejado que él perdiera a sus amigos por mí, me sentiría muy culpable, que el pasara por lo que yo paso.

Vino mi madre a hablar con la directora. Alicia se había inventado muchas cosas. Mi madre estaba decepcionada. Tocaron a la puerta. Me sorprendí al ver a toda la clase, allí detrás de la puerta. Vinieron a contarle la verdad, todo lo que Alicia me estaba diciendo y a disculparse conmigo. El director llamó a los padres de Alicia y ya os imagináis el resto.

Al salir del instituto, vi. a Dani, fui a saludarlo, pero el me trató con indiferencia.

-         ¿Por qué me dijiste que no te ayudara?

-         Porque no necesitaba ayuda.

-         Pero os sino, hubiera sido peor.

-         Ya, pero tus amigos son de la panda de Alicia y no puedo permitir que tú te pelees con ellos por mí.

-         ¿No me digas que era por eso?

-         Sí.

-         Pero a mí me da igual, tú eres mi mejor amiga, me da igual pelearme con quién sea.

-         Lo siento mucho.

-         Baaa no pasa nada Garfield.
Lo miré con cara asesina, pero sin saber como, acabé abrazándolo. Fue un abrazo cálido y correspondido. Me hubiera quedado así para siempre.